Primer pasaje del libro "El petirrojo que no sabía volar"
Había una
vez una pareja de petirrojos que vivían debajo del tejado de una granja.
Allí, entre
las vigas del cobertizo, hicieron un nido. Para hacerlo fueron llevando
hierbitas una a una hasta que el lugar fue confortable, cálido y seco.
Una vez que todo
estuvo listo la mamá y el papá Petirrojo empollaron los huevos para que
tuviesen el calor suficiente para eclosionar.
La pareja de
mamá Petirrojo, además de proporcionarle la comida para que ella pacientemente
realizara su labor, evitaba mediante vuelos rasantes que nadie se acercase al
nido, no fuera que alguien robara los huevos o molestase a la madre.
Pasado el
tiempo nacieron los tres pequeños pajaritos: Pitxi, Mitxi y Gruñón.